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Catalunya

Cataluña es una comunidad autónoma en España en la esquina noreste de la Península Ibérica, designada como una nacionalidad por su Estatuto de Autonomía. Cataluña está formada por cuatro provincias: Barcelona,​​Girona, Lleida y Tarragona. La capital y la ciudad más grande es Barcelona,​​el segundo municipio más poblado de España y el núcleo de la sexta área urbana más poblada de la Unión Europea. Comprende la mayor parte del territorio del antiguo Principado de Cataluña. Limita con Francia y Andorra al norte, el mar Mediterráneo al este y las comunidades autónomas españolas de Aragón al oeste y Valencia al sur. Los idiomas oficiales son el catalán, el español y el dialecto aranés del occitano.

A fines del siglo VIII, los condados de la Marcha de Gothia y la Marcha hispánica fueron establecidos por el reino franco como vasallos feudales en todo el Pirineo oriental y cerca de él, como defensivos. Barrera contra las invasiones musulmanas. Los condados orientales de estas marchas se unieron bajo el gobierno del vasallo franco, el conde de Barcelona,​​y más tarde se llamaron Cataluña. En 1137, los linajes de los gobernantes de Cataluña y los gobernantes del Reino de Aragón se unieron por matrimonio bajo la Corona de Aragón, cuando el rey de Aragón casó a su hija con el Conde de Barcelona. Este cambio de lealtad, que significaba que el hecho de no formar parte del reino franco para formar parte de la Corona de Aragón, fue ratificado por los gobernantes francos y aragoneses en el Tratado de Corbeil en 1258.

El Principado de Cataluña desarrolló su propio sistema institucional, como como tribunales, y constituciones, convirtiéndose en la base del poder naval de la Corona de Aragón, el comercio y el expansionismo en el Mediterráneo. En la Edad Media tardía, la literatura catalana floreció. Durante los últimos siglos medievales, los desastres naturales, los disturbios sociales y los conflictos militares afectaron el Principado. Entre 1469 y 1516, el rey de Aragón y la reina de Castilla se casaron y gobernaron sus reinos juntos, conservando todas sus instituciones y legislación distintas. Durante la guerra franco-española, Cataluña se sublevó contra una presencia grande y onerosa del ejército real en su territorio, siendo proclamada brevemente una república bajo protección francesa. En un breve período, Francia tomó el control total de Cataluña, hasta que fue reconquistada en gran parte por el ejército español.

Bajo los términos del Tratado de los Pirineos en 1659, la Corona española cedió las partes del norte de Cataluña, principalmente el Condado de Roussillon, a Francia. Durante la Guerra de Sucesión española, la Corona de Aragón se puso del lado del Borbón Felipe V de España. Tras la derrota catalana el 11 de septiembre de 1714, Felipe V, inspirado en el modelo de Francia, impuso una administración unificada en toda España, promulgando los decretos de Nueva Planta, suprimiendo las principales instituciones y derechos catalanes como en los otros reinos de la Corona de Aragón. Esto llevó al eclipse de catalán como lengua de gobierno y literatura, reemplazado por el español. A lo largo del siglo XVIII, Cataluña experimentó un crecimiento económico, reforzado a finales del cuarto de siglo, cuando terminó el monopolio comercial de Castilla con las colonias americanas.

En el siglo XIX, Cataluña se vio gravemente afectada por las guerras napoleónica y carlista. En la segunda mitad del siglo, Cataluña experimentó una importante industrialización. A medida que crecía la riqueza de la expansión industrial, Cataluña vio un renacimiento cultural junto con un incipiente nacionalismo mientras aparecían varios movimientos obreros. En 1914, las cuatro provincias catalanas formaron una comunidad, y con el retorno de la democracia durante la Segunda República Española, la Generalitat de Cataluña fue restaurada como un gobierno autónomo. Después de la Guerra Civil española, la dictadura franquista adoptó medidas represivas, aboliendo el gobierno autónomo catalán y prohibiendo el uso oficial de la lengua catalana de nuevo.

Después de un primer período de autarquía, desde finales de la década de 1950 hasta la década de 1970, Cataluña experimentó un rápido crecimiento económico, atrayendo a muchos trabajadores de toda España, convirtiendo a Barcelona en una de las mayores áreas metropolitanas industriales de Europa y convirtiendo a Cataluña en un importante destino turístico. Desde la transición española a la democracia, Cataluña ha recuperado una considerable autonomía en asuntos políticos, educativos, medioambientales y culturales y ahora es una de las comunidades económicamente más dinámicas de España. En la década de 2010 ha habido un creciente apoyo a la independencia catalana. El 27 de octubre de 2017, el Parlamento catalán declaró su independencia de España tras un referéndum en disputa. El Senado español votó a favor de hacer cumplir el gobierno directo eliminando a todo el gobierno catalán y convocando elecciones regionales para el 21 de diciembre.

El 2 de noviembre del mismo año, la Corte Suprema española encarceló a 7 ex ministros del gobierno catalán por cargos de rebelión y mal uso de fondos públicos, mientras que otros, incluido el presidente Carles Puigdemont, huyeron a otros países europeos.